Manuel
complicó a los historiadores mitristas, ya que algunos de sus logros
fueron producto de desobediencias al gobierno porteño. Por eso se lo
recuerda desprolijamente. Suena raro que el 20 de junio, fecha de su
muerte en 1820, se tome como Día de la Bandera, cuando la enseña
patria fue enarbolada un 27 de febrero, de 1812.
Impulsó
la educación popular, el respeto a los pueblos ancestrales, el
periodismo, la reforma agraria, la industria nacional y la justicia
social. Y advertía: “Se ha dicho muy bien que el estudio del
pasado enseña cómo debe manejarse el hombre en lo presente y
porvenir”.