Por Francisco "Vasco" Oyarzabal En 1317 Juan de Castilla juró los Fueros del señorío de Vizcaya. Los Fueros Vascos eran el conjunto de instituciones y su ordenamiento jurídico y Guernica fue el lugar donde de reyes y señores juraban su respeto.
Guernica es, sin dudas, el lugar de referencia de las tradiciones y la nacionalidad vasca.
Comenzada la guerra civil española, los vascos se alinearon en defensa de sus fueros y de la democracia, contra la sublevación de Franco y su ejército, quien recibió inmediata ayuda de Hitler. Así llegó a España la Legión Cóndor, flor y nata de aviación alemana, con 5000 hombres y 100 aviones.
25 de abril: En la base aérea de Burgos, los Heinkel y los Junker cargaron bombas explosivas, rompedoras y la novedad: 2500 bombas incendiarias. Guernica debía arder y con ella sus edificios de madera y también la resistencia vasca.
26 de abril: Lunes soleado y día de feria. Guernica tenía gente de los alrededores buscando abastecerse y soldados que venían en retirada intentando acercarse a Bilbao.
A las 16.30, en una primera pasada de aviones arrojaron bombas grandes que rompían los edificios. Minutos después otras naves soltaron bombas incendiarias para quemar todo lo roto y ametrallar a al pueblo indefenso.
El ataque duró 3 horas y media, dejó cientos de muertos mutilados y la villa destruída.
Tres días después del bombardeo entró en Guernica el ejército franquista al mando del general Mola, el mismo que quería que la Legión Cóndor destruyera Bilbao ya que sus fábricas “han llenado a España de proletarios”.
La prensa de Franco intentó responsabilizar a las “hordas rojas” de dinamitar y quemar Guernica.
El mismo Generalísimo sostenía en 1950 en Bilbao: “Guernica fue violada e incendiada por los marxistas antes de su huída”.
Pero, el mariscal Goering dijo en el juicio de Nuremberg que la Guerra Civil de España fue “una oportunidad para poner a prueba a mi joven fuerza aérea así como para que mis hombres adquirieran experiencia”.
Guernica fue un ejercicio, un ensayo de guerra total. No fue la primera ciudad bombardeada por la Legión Cóndor, ni la última.
La guerra civil provocó un millón de muertos y más de cien mil desaparecidos, la mayor parte de ellos fusilados por el franquismo.
Pablo Picasso, junto a su célebre cuadro escribió: “gritos de niños / gritos de mujeres / gritos de pájaros / gritos de flores …”
Hoy, los familiares de las víctimas reclaman verdad y justicia.
